Gobernadora Kelly Responde Firmemente a la Retención de Fondos de SNAP por Datos PrivadosEricks Webs DesignEricks Webs Design

Por Karen Gutierrez, Univision
Topeka, Kansas — 4 de diciembre de 2025

La gobernadora de Kansas, Laura Kelly, enfrenta nuevamente presión del gobierno federal tras el anuncio del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) que plantea retener fondos administrativos del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) para varios estados, incluyendo Kansas. Esta medida se fundamenta en la solicitudes de datos personales de miles de beneficiarios, situación que ha generado controversia.

La controversia ha escalado en medio de tensiones crecientes entre la administración Trump y al menos 22 estados gobernados por demócratas, que rechazan el requerimiento federal, argumentando que es ilegal, invasivo y atenta contra la privacidad de los ciudadanos.

¿Qué exige el USDA y por qué los estados se niegan?

Desde febrero, el USDA ha solicitado a todos los estados que proporcionen información personal detallada sobre los beneficiarios de SNAP. Los funcionarios federales justifican esta solicitud como un medio para identificar a ciudadanos estadounidenses que perciben beneficios de manera indebida.

Los estados involucrados, incluido Kansas, argumentan que esta solicitud no tiene respaldo legal, invade la privacidad de los residentes y podría poner en riesgo las protecciones constitucionales. Aseguran que cumplir con las demandas federales podría sentar un precedente peligroso en la gestión de los programas sociales.

La administración Trump ha respondido al desafío anunciando que retendría fondos administrativos de SNAP, una decisión que podría complicar la logística de los programas de asistencia alimentaria en Kansas, afectando especialmente a las zonas rurales y de alta pobreza.

Kelly: “No tengo ningún interés en que la gente pase hambre”

En respuesta al anuncio del USDA, la gobernadora Kelly fue contundente. En declaraciones este miércoles, reiteró que no cederá ante las presiones para entregar datos privados de los residentes.

“No tengo absolutamente ningún interés en que la gente pase hambre”, afirmó. “Tampoco tengo interés en ser intimidada para entregar información personal y privada. Estoy en una situación difícil. Debo proteger la privacidad de las personas y también debo proteger su mesa de comedor”.

La gobernadora menciona que está trabajando con su equipo legal para evaluar los próximos pasos, lo que sugiere que Kansas podría estar preparado para litigar nuevamente la medida en las cortes federales.

Un conflicto que no es nuevo

Esta no es la primera ocasión en que la administración Trump intenta sancionar a Kansas por negarse a entregar información de beneficiarios de SNAP. En septiembre, el USDA notificó al estado sobre la posible retiro de más de $10 millones en fondos relacionados con el programa.

A pesar de que esta acción no se materializó, ya que la gobernadora acudió a los tribunales, donde el caso sigue bajo revisión, el nuevo anuncio indica que la administración federal está lista para reavivar el conflicto.

Los analistas advierten que, si se concretan los recortes, miles de familias podrían enfrentar demoras en la distribución de beneficios, ya que los fondos administrativos son cruciales para personal, sistemas, verificación de elegibilidad y otros componentes operativos esenciales.

¿Qué está en juego para Kansas?

El programa SNAP es un recurso vital para miles de hogares en el estado. Aunque no se están retirando los beneficios directos para alimentos, la suspensión de los fondos administrativos podría ocasionar:

• Menos personal para procesar solicitudes
• Retrasos en la verificación de casos
• Tiempos de espera más largos
• Riesgo de interrupciones temporales en la distribución de ayuda

Asimismo, organizaciones comunitarias advierten que la incertidumbre puede desmotivar a familias elegibles a solicitar beneficios por temor a la exposición de sus datos o a cambios en los requisitos.

Un debate nacional sobre privacidad y elegibilidad

El conflicto en Kansas forma parte de un debate más amplio sobre la gestión de datos sensibles en los programas sociales. Los gobiernos locales temen que la entrega de listas con información personal de beneficiarios se utilice para fines ajenos a SNAP o para tomar medidas punitivas contra personas vulnerables.

Desde la perspectiva de la administración Trump, la transparencia es crucial para identificar abusos dentro del programa. Para los estados, el requerimiento federal excede la autoridad del USDA y plantea riesgos legales y morales significativos.

¿Qué sigue?

A medida que la gobernadora Kelly reafirma su compromiso de proteger la privacidad de los residentes y garantizar que las familias no pierdan el acceso a la asistencia alimentaria, su equipo legal evalúa opciones que incluyen nuevas apelaciones y posibles demandas.

Por el momento, Kansas sigue entre los 22 estados que resisten, mientras la administración federal considera cómo y cuándo aplicará los recortes. El impacto final dependerá de las decisiones judiciales y de la respuesta colectiva de los estados afectados.

Lo que es indiscutible es que miles de familias en Kansas dependen de SNAP para cubrir sus necesidades básicas, y cualquier interrupción representa un riesgo significativo para la seguridad alimentaria en la región.